Cada vez son más los turistas que piden comida orgánica, vegana, vegetariana, macrobiótica y naturista. Por ese motivo, varias organización es se han reunido para analizar esa tendencia que es internacional.
Pocos saben que la gran diferencia entre la agricultura convencional y la agricultura orgánica está en los pesticidas y las aguas contaminadas, presentes en la agricultura convencional.
En Estados Unidos, el número de personas que ya consume alimentos orgánico es muchísimo mayor que el de Colombia. En Santander, por ejemplo, una corporación inglesa apoya a un proyecto de agricultura orgánica, debido a la falta de interés de las alcaldías locales.
En Colombia no hay aún una ley de agricultura orgánica, pero Quindío podría ser modelo en ese tipo de cultivos, que encaja en el agroturismo y en el ecoturismo, promocionado por ese departamento.
Actualmente, ese tipo de turismo recibe aproximadamente tres millones de visitantes.
